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jueves, 12 de marzo de 2020

El Titanic tachirense: la tragedia del Vapor "Sucre" en el Lago de Maracaibo │The Sinking of the Vapor 'Sucre': A Painful Tachiran Memory

 




Puerto de Encontrados, en la ribera derecha (aguas abajo) del río Catatumbo. Estación de inicio del Gran Ferrocarril del Táchira, desde 1895. Imagen del puerto fluvial para 1892 tomada del libro "Au Vénézuela". Souvenirs de Madame Leontine Perignon de Roncayolo (1876-1892). Imprimerie Paul Duponts (París-Clichy, 1895, p. 167). Madame Roncayolo era la esposa del Jean-Batiste Roncayolo (quien castellanizó su nombre como Juan Bautista Roncayolo), ingeniero de ferrocarriles del  Gobierno de Venezuela en la presidencia del General Joaquín Crespo, quien estaba haciendo los estudios y trabajos del trazado final del Gran Ferrocarril del Táchira.



Túmulo funerario memorativo levantado en la Iglesia parroquia de Lobatera en el último día del novenario por las víctimas del naufragio del vapor "Sucre". Marzo de 1925 (Foto: Carlos Alviárez Sarmiento, Lobatera, 2020).


El vapor “Sucre” era un barco de motor para pasajeros que tenía un itinerario fijo y regular entre los puertos de la Boca del Catatumbo, que comunicaba con la estación de Encontrados (donde finalizaba el Gran Ferrocarril del Táchira), Santa Bárbara del Zulia y Maracaibo, hundiéndose, al sur del Lago de Maracaibo, la noche del 12 de marzo de 1925. De todas las personas que fallecieron ahogadas, catorce, eran de Lobatera, Michelena y San Juan de Colón.

En Lobatera, el sepelio se realizó en la población al toque de plegaria de duelo, todo el día [esto es cuando el sacristán hacía el repique lento y pausado de la campana menor o campanilla, seguido, cada cinco minutos, del sonoro sonido del doble dado con fuerza, a la vez, con las campanas mayor y mediana de la Iglesia] y fueron elaboradas catorce cruces de madera con los nombres de todos los fallecidos, que luego se repartieron entre las familias del poblado.

Las causas del naufragio se atribuyeron, en parte, a un error humano: la imprudencia del capitán del vapor quien permitió que el barco se cargara con un exceso -muy considerable de cargas de café, haciendo que la línea de flotación estuviera por debajo de su nivel normal. Mientras duró la travesía por el río Catatumbo no se presentaron problemas, al entrar al Lago de Maracaibo, coincidió con una tormenta que generó tres grandes olas. Al choque de la primera con el lado de babor del vapor, la mayoría de las personas que viajaban se refugiaron hacia el lado de estribor para evitar la borrasca, hecho que, sumado a el choque de dos olas más y el probable sobrepeso del barco, hizo que se volteara la embarcación, salvándose sólo cinco personas que sabían nadar, cuatro tripulantes y un pasajero.
Por una foto de la época, se conoce el túmulo memorativo, con catorce cruces y una barca simbólica, que se levantó en la antigua iglesia parroquial de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, en Lobatera, el 21 de marzo de 1925 con motivo del último día del novenario por las víctimas de la tragedia del Vapor "Sucre".

Testigos recuerdan que el "Sucre" era un barco que transportaba pasajeros desde la ensenada de Aguas Muertas, donde hizo el rutinario transbordo de personas y mercancías provenientes del puerto fluvial de Encontrados (primera estación del Gran Ferrocarril del Táchira) hasta el puerto de Santa Bárbara del Zulia y la la ciudad de Maracaibo.

El 12 de marzo de 1925, el Vapor "Sucre" zarpó de la ensenada, donde desemboca el río Catatumbo en el Lago de Maracaibo, a las 10:00 p. m. en medio de una fuerte tormenta lacustre.

Al poco tiempo de haber partido, la embarcación zozobró por la fuerza de los vientos y el oleaje provocado por la tormenta y se comentaba, por igual, que sucedió por haber sido sobrecargado el vapor con sacos de café.

En esta tragedia murieron catorce pasajeros de Lobatera, Michelena y Colón, entre familias, funcionarios públicos y comerciantes. Cada una de las cruces que se prepararon para su tumba [túmulo funerario memorativo] en la Iglesia [parroquial de Lobatera], tenía, en forma abreviada, el nombre de una de las personas que murieron, ej. R.V.P. Román Vivas Pérez o A.d.S. Agustina Colmenares de Sánchez [pariente político de quien esto relata].

Al finalizar los días del novenario, las cruces fueron repartidas por el Padre Pedro María Morales entre las familias del pueblo, en especial entre aquellas que habían perdido un ser querido en la tragedia de las aguas del Lago de Maracaibo (Relato copiado a las versiones de Doña Maximiana Sandoval vda. de Sánchez y de la Srta. Rosario Borrero, Lobatera, 1985).

Otra versión, ya documental y en detalle, se encuentra en la obra Naufragio misterioso de Juan Apolinar Uzcátegui, publicada en Maracaibo, en la Imprenta “El Propio Esfuerzo”, en 1927. Allí se narra que los pasajeros partieron de Estación Táchira hasta Encontrados el 11 de marzo de 1925 a las 7:00 am, llegando a la estación fin del trayecto ferroviario a las 5:00 pm. Habían embarcado en el lanchón “Villamizar” comandado por el capitán Carlos Boscán, en el puerto fluvial de Encontrados, el 12 de marzo a las 7:00 am con destino a la boca del río Catatumbo en el Lago de Maracaibo, donde harían el transbordo al vapor “Sucre”.

El Coronel Marco Tulio Olivares Mora, funcionario público de alto rango, iba en compañía de su esposa, la señora María Jesús Villalobos de Olivares, de su suegra, la señora Amanda de Villalobos, de la señora Doña Agustina Colmenares de Sánchez, de la señora Elba de Vivas, del señor Pedro Sánchez, de la señorita Ana Rosa Mora, de la niña Carmen Rosa Vivas, del señor Ciro Morales, del señor Fidencio Morales, de las personas de servicio Trina de Ramírez, María Luisa Arellano, Francisca de Ramírez, y del niño Manuel Vivas. En el embarcadero de la boca del río Catatumbo se les unió el Coronel Román Vivas Pérez.

El vapor “Sucre”, comandado por el capitán Helímeneas González, se adentró hacia la ensenada de Aguas Muertas con destino a Santa Bárbara del Zulia. De allí muchos seguirían a Mérida a través del ferrocarril Santa Bárbara-El Vigía.
A las 10:02 pm ocurriría la tragedia. Era la hora, detenida en el tiempo, que marcaba el reloj que portaba el pasajero Coronel Román Vivas Pérez cuando se rescató su cadáver […]. Sólo cinco sobrevivieron, cuatro tripulantes y un pasajero: Carlos Boscán, Helímeneas González, Augusto Molero y José María Hernández y Ciro Morales. Ellos sobrevivieron por saber nadar y por mantenerse agarrados a una toldilla [cubierta parcial que tienen algunos buques a la altura de la borda, desde el palo mesana al coronamiento de popa] del barco que flotó. El mismo oleaje del lago los empujó hasta una playa a donde llegaron a las 4 de la madrugada aproximadamente, refugiándose sobre las gruesas ramas de la vegetación que sobresalía de las aguas.

A las 9 am, los encontró y auxilió un pescador que pasaba por allí y los trasladó al embarcadero de la Boca del Catatumbo, donde dieron la noticia de lo ocurrido, saliendo el remolcador “Táchira” del embarcadero de la boca hacia el sitio del naufragio, a recoger los cadáveres de los fallecidos, pero estos sólo comenzaron a flotar sobre el lago a parir del día 14 de marzo […].

En los días posteriores el Vapor “Sucre”, hundido a 4 metros bajo el nivel del lago, fue sacado a flote y en vano se buscó rescatar la cantidad de 16.000 bolívares de la época que se decía iban en el vapor. Luego, reconstruido, siguió prestando sus servicios a la línea si bien no se pudo desprender de su hado y el 1º de febrero de 1927, a las 11:00 pm, mientras navegaba hacia el Lago de Maracaibo desde la boca del río Escalante, un voraz incendio acabó para siempre con aquella estructura que arrastraba, cual antiguo impenitente barco de las leyendas de los marinos medievales, una carga invisible de tragedia, dolor y amargura.

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Fuentes:

Sra. Maximiana Sandoval vda. de Sánchez (1908-2004)

Srta. Rosario Borrero (1927-2006) 

Apolinar Uzcátegui, Juan. Naufragio Misterioso, Imprenta El Propio Esfuerzo, Maracaibo, 1927, pp. 9-26.

Este libro fue facilitado por el Abogado Wilmer Antonio Rey Lozada, sobrino nieto de Doña María Lozada de Mora (Borotá, 1892 – Lobatera, 1993) el cual había pertenecido a su esposo el Coronel Juan Antonio Mora, quien se desempeñaba como Jefe de talleres y patios del Gran Ferrocarril del Táchira para la época y, encontrándose en Santa Bárbara del Zulia fue una de las primeras personas que llegó al sitio de la tragedia, por cuando se impacientó al ver que el barco con sus familiares no llegaban a la hora pautada por el itinerario de la empresa de vapores del Lago.





© Proyecto Experiencia Arte / Experience Art Project 2012-2020. Algunos derechos reservados. Los derechos de autor de las fotografías pertenecen a cada fotógrafo, grupo o institución mencionada.



miércoles, 14 de enero de 2015

El vapor «Táchira», un episodio de la Segunda Guerra Mundial | ‘Táchira’ vessel, a short-lived episode during World War II





Reviewing the photographic collections of the State Library of New South Wales (Sydney), in 2014, and looking old images, I came across the word "Táchira". This fact make me connecting with my land and it immediately activated, overwhelmingly, in my mind, the most deeply rooted and affective, and emotional signals. I asked for authorization to obtain some copies as well as to publish them, which was granted after consigning the text with which it would be published. This action is understood -in a culture that values study and research- as a way of sharing and disseminating efforts, a true symbiosis to expand universal knowledge. 

It is the first time that the history of the "Táchira" American Steam Merchat is documented in Spanish.

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En 2014, revisando colecciones fotográficas de The State Library of New South Wales (Sydney), al repasar imágenes antiguas, me encontré con la palabra «Táchira». La misma activó de inmediato, en nuestra mente, las señales de alerta de mayor raigambre y afectividad. Acto seguido, pedí la autorización para obtener unas copias, así como para publicarlas. La misma fue concedida luego de consignar el texto con que se publicarían. Esto es una acción entendida -en una cultura que valora el estudio y la investigación- como un intercambio para compartir y difundir esfuerzos, verdadera simbiosis para ampliar el conocimiento universal.

Parte de esa investigación, llevada al castellano por primera vez, desde todas las fuentes originales consultadas en la misma biblioteca, se comparte a continuación:


En las profundidades de las Caimán


A 375 millas náuticas al oeste de la Isla de Jamaica y en las abismales oscuridades de la Fosa de las Caimán, a una profundidad mayor que la del S. S. «Titanic», subyace el pecio de un vapor mercante el cual conserva en ya desgastada inscripción –hacia el extremo superior de estribor, de la proa- el milenario y mítico nombre de «Táchira».


En el contexto de la Batalla del Caribe (
Bedienung Neuland -Neues Land- para los alemanes), extensión americana de la Batalla del Atlántico (de 1941 a 1945) como enfrentamiento entre los ejércitos Aliados y los del Eje, en la Segunda Guerra Mundial, a las 11:46 pm del 12 de julio de 1942, un torpedo lanzado por el submarino alemán U-129 (dirigido por Nicolai Clausen y uno de los cinco asignados a la Operación Neuland, comandada por Werner Hartenstein desde el submarino U-156), golpeaba con fuerza por estribor la cuarta bodega y el cuarto entrepuente del vapor «Táchira», perforándolo ampliamente y haciendo que este naufragara en un tiempo de tres minutos. El hecho se daba entre los cuadrantes DM y EB de la franja o nivel "Amerika II", según las cartas de navegación de los submarinos alemanes de la época.


El vapor mercante -con un rumbo en zigzag por los peligros bélicos de ese trayecto marítimo-
de 2.325 toneladas de desplazamiento, provenía del puerto de Maracaibo (al cubrir la ruta Barranquilla-Maracaibo-Nueva Orleans) con una carga de cacao, vainas de dividivi (del cual se extrae un tanino tintóreo) y café tachirense para el puerto de Nueva Orleans, en los Estados Unidos.


El «Táchira» -que navegaba bajo bandera estadounidense- pertenecía, desde 1938, a la Compañía Grace Line Inc (W.R. Grace & Co), cuya casa comercial principal quedaba en Nueva York.


De su tripulación, conformada por 8 oficiales, 24 marinos mercantes y 6 marinos de la Armada de los Estados Unidos (por cuanto el barco había sido dotado de un cañón de 3 pulgadas), y cuyo capitán era el marino mercante Sverre Mordale Gram, sobrevivieron 33 y fallecieron 5.


Los sobrevivientes, en un bote salvavidas y tres balsas, luego de ser capturados e interrogados (en específico sobre las características de la zona geográfica donde se encontraban) fueron liberados por los alemanes y alcanzaron las playas de Punta Herrero, en la costa Maya (Yucatán – México), el 16 de marzo de 1942.





Orígenes del vapor «Táchira»



El barco, en acero y con unas dimensiones de 79,6 x 13,3 x 6,8 m fue construido en 1920, con características para cargar petróleo y melaza del Caribe, por la Compañía McDougall-Duluth Shipbuilding Co, Duluth (Minnesota – Estados Unidos). Formó parte de una producción de cinco barcos en serie con los cuales la compañía esperaba recuperar sus ventas, luego de la caída de las mismas al finalizar la Primera Guerra Mundial. 


La Compañía Contrabrino de Navegación (de Barcelona, España) adquirió dos unidades por intermedio  de un agente comercial belga y le dio los nombres de: «Josefa» y «Antonio». Ambos buques partieron -con gran pompa- del puerto de Duluth con destino a Barcelona, España, el 8 de noviembre de 1920 a la 1:30 pm y 4:20 pm respectivamente. 





Vapor mercante «Antonio». Fotografía anterior a 1922. En octubre de 1922 fue renombrado S.S. ‘Elizabeth R.’ y posteriormente S.S. ‘Táchira’. Foto: State Library of New South Wales, [a636172]. Collection 'Ernest G. Best postcard collection of merchant vessels, naval vessels and sailing vessels, chiefly ca. 1900-1940'. No reproducir sin autorización previa de State Library of New South Wales (Australia) / This image is provided for research purposes only and must not be reproduced without the prior permission of the State Library of NSW (Australia).








Vapor mercante «Antonio» preparado para partir a Barcelona (España) en su viaje inaugural. Presenta banderas náuticas desplegadas por encontrarse en puerto y muelle. Fotografía del 8 de noviembre de 1920, en el puerto de Duluth, Minnesota, Estados Unidos.  Foto: State Library of New South Wales, [a6361723]. Collection 'Ernest G. Best postcard collection of merchant vessels, naval vessels and sailing vessels, chiefly ca. 1900-1940'. No reproducir sin autorización previa de State Library of New South Wales (Australia) / This image is provided for research purposes only and must not be reproduced without the prior permission of the State Library of NSW (Australia).


No obstante, problemas de liquidez de la empresa compradora impidieron el debido pago de los mismos, motivo por el cual luego de un juicio de embargo fueron devueltos a la compañía fabricante quien, en breve tiempo, logró vender los dos barcos a otras navieras españolas. El «Antonio»  fue adquirido por Pérez&De Andrés.



Conservando su nombre original, navegó bajo bandera española hasta octubre de 1922 (y el «Josefa» lo hizo -pasando por la Guerra Civil Española y la Segunda Guerra Mundial- hasta 1964 por desguace) cuando es adquirido nuevamente por la Compañía McDougall-Duluth Shipbuilding Co, Duluth (Minnesota – Estados Unidos) quien renovó la maquinaria dotándolo de motor de vapor de triple expansión que generaba 1.900 caballos de fuerza y una velocidad de 9,5 nudos. Reforzó por igual la cubierta así como el casco, renombrando la nave como S.S. «Elizabeth Regina». 


Al poco tiempo fue adquirido por la Compañía Atlantic & Caribbean Steam Navigation Co, con sede principal en Wilmington (Delaware – Estados Unidos) quien cambió nuevamente su nombre por S.S. «Táchira» y lo asignó a su línea marítima venezolana de La Guaira-Curazao-Maracaibo, la cual cubría desde 1881.


En 1939, cuando la anterior línea fue transferida a la Compañía Grace Line Inc (W.R. Grace & Co) de Nueva York, el vapor «Táchira», con el mismo nombre, y dada su mayor capacidad de depósitos para mercancías, pasó a navegar en la ruta Barranquilla-Maracaibo-Nueva Orleans, hasta su hundimiento en 1942.



 
Vapor mercante «Táchira» / S. S. 'Táchira'. Foto: American Merchant Ships sunk in WWII [http://www.armed-guard.com/sunk.html], reproducción con fines educativos/Image for educational purposes.



 

Literatura y referencias informativas en la Red que permitieron reconstruir, por primera vez en español, la historia del Vapor《Táchira》/ Informative Websites and texts that allowed reconstruct of the S.S. 'Táchira' history for the first time in Spanish language


 
U-Boat 

[http://www.uboat.net/allies/merchants/1920.html]

Wreck Site 
[http://www.wrecksite.eu/wreck.aspx?15722] 

WWII Cruisers, USA Ship Losses 1942 
[http://www.world-war.co.uk/warloss_836usa.php3]

American Merchant Ships sunk in WWII  
[http://www.armed-guard.com/sunk.html]

Deutsch Linien  
[http://www.deutsch-linien.de/operation_neuland] 

State Library of New South Wales. Collection 'Ernest G. Best postcard collection of merchant vessels, naval vessels and sailing vessels, chiefly ca. 1900-1940' [a636172] and [a636173]
[https://sl.nsw.gov.au]

W. Worth Point/German Kriegsmarine U-Boat Map WWWII Submarine [https://www.worthpoint.com/worthopedia/german-kriegsmarine-u-boat-grid-map-wwwii-submarine]

World War I/McDougall's Whaleback
[https://daleymcdougall.wordpress.com]


© Proyecto Experiencia Arte / Experience Art Project 2012-2015. Algunos derechos reservados. Los derechos de autor de las fotografías pertenecen a cada fotógrafo, grupo o institución mencionada.